Al abrir el archivo que titulaba "autobiografía" pensé que estaba a punto de encontrarme con algún tipo de broma clásica o alguna de esas cadenitas insoportables que se presentan en ocasiones llenando tu correo electrónico para condicionar tu suerte futura. No fue así, al contrario, me encontré con algo mucho más serio. Eran 13 hojas que resumían 20 años de vida...13 hojas que me pusieron a pensar. ¿Cómo hacer entrar tanto tiempo en tan pocas páginas,? parecía uno de esos proyectos para la materia de literatura en los tiempos del colegio.
Comencé analizando el título "La Vida es Hermosa", me recordó a esa película con la que lloré tanto La vida es bella. No podía ser una analogía, de ninguna forma podía ser una tragedia de las misma índole, quizás esta biografía si tendría correspondencia con el título, pensé. Después del título me detuve abruptamente frente a una advertencia, "esta no es una aventura" la cual, al mismo tiempo, me sugería buscar una película en el cine en caso de que quisiera encontrar alguna en las páginas siguientes. Sí, es un pésimo escritor para comenzar, pensé. La vida puede ser rutinaria hasta un poco monótona, pero nosotros como escritores siempre encontramos el lado AVENTURERO y MÁGICO a lo que vivimos día tras día. Dejamos que el lector encuentre su propia emoción en el pasar de los días...(No es, por supuesto, un hombre común)
Las líneas siguieron su transcurso mientras iban contando una a una pequeños sucesos que tenían la importancia necesaria para ser mencionados. Me refiero al nacimiento, la familia, el colegio, los amores... haciendo mucho incapié en éste tema. Había pensado en un título alternativo para aquella autobiografía... yo la habría bautizado como "Mis amores, tragedias y un poco de la cotidianidad de mi vida" para hacer un orden de prioridades de aquella historia. Pero no era mi vida en cuestión, era la perspectiva de alguien que aprecio bastante sobre la suya propia.
Me pregunté entonces ¿cómo llamaría a mi propia autobiografía? ...pero no tenía muchas ideas. Quizás le pondría lo primero que se vendría en mente... "La vida como un maní" (¿maní? con chocolate mínimo...) Pero, la pregunta del millón sería ¿en que momento empieza la vida? Quizás debería hablar de mi nacimiento como un punto de partida, o como bien lo expresa el autor que mencioné hace poco, desde una celula llamadas "cigoto" creada con la pasión de dos personas en un momento netamente impulsivo. Pero, en mi caso, buscaría una fecha en específico que le daría el comienzo oficial a mi vida. Por ejemplo diría... Mi nombre es Laura y mi verdadera vida comenzo un diciembre del año 2007, cuando salí de un caparazón duro para cambiar mi forma de ver el mundo (Nada ha cambiado excepto mi actitud, por eso TODO ha cambiado) Y pues, los años anteriores serían solo simples pasos para llegar al inicio y los que le siguen son trasformaciones, peleas, opiniones y muchas otras alegrías como en una ensalada de frutas.
Si lo vemos desde otro punto de vista, podríamos escribir una autobiografía en muchas hojas tan solo contando el día de hoy, los pequeños detalles que hacen esta vida tan maravillosa. Un amanecer y un atardecer entre el paso de las horas, entre sonrisas y lágrimas que nos ayudan a crecer. Una vida por cada día... quizás de esa forma apreciaríamos el tiempo mucho más.